EFE
¿Su pareja sabe dónde estuvo ayer por la noche aunque usted no se lo haya dicho? ¿Ha
tenido conversaciones concretas con amigos y familiares y su pareja sabe exactamente lo que se ha dicho? ¿Ha recibido en su teléfono un mensaje de su pareja diciéndole “sé dónde estás en este momento…?”.
Si es así, podría ser víctima de ‘stalkerware’, una serie de programas informáticos disponibles que se usan para espiar a otras personas a través de sus dispositivos móviles sin que lo consientan, según la Coalición contra el Stalkerware (CAS, por sus siglas en inglés) formada por grupos y organizaciones de ciberseguridad en las tecnologías de la información o TI.
El ‘stalkerware’ es un ejemplo de cómo las tecnologías pueden convertirse en un riesgo para nuestras vidas, ya que este software disponible comercialmente permite a una persona vigilar a su pareja, facilitando la violencia de género y doméstica, así como el acoso y el abuso sexual, según la CAS.
Este tipo de ‘software’ puede registrar las pulsaciones de las teclas del teléfono y también permite a la persona que monitoriza un dispositivo ajeno, acceder a los mensajes de texto, información de llamadas, ubicación por medio de GPS, y actividad en las redes sociales, todo ello sin que el usuario espiado sepa que está funcionando.
Tras instalar una aplicación (‘app’) de ‘stalkerware’ en los dispositivos Android o iOS de la víctima (‘smartphones’ y ‘tablets’) la persona que la espía obtiene acceso a múltiples datos personales, aunque esté lejos de la persona espiada, según explica la CAS.
El ‘stalkerware’ oculta su presencia, por lo que la víctima no observa en la pantalla ningún icono de la ‘app’ espía ni es notificada de que la están monitorizando a distancia o que se están compartiendo sus datos, puntualiza esta organización. (https://stopstalkerware.org/es). Sin embargo, el ‘stalkerware’ se puede delatar a sí mismo por medio de una serie de signos, que la persona debe buscar para detectarlo si sospecha que está siendo espiada. (vídeo explicativo en https://www.youtube.com/watch?v=_ens5N_36yo). Por ejemplo, este tipo de programas requieren el acceso al micrófono y a la cámara del dispositivo.
Software invisible efectos visibles
“Al ser instalado en el teléfono o la tableta de la víctima, hace posible que el acosador acceda al contenido del dispositivo, incluidas las fotos”, advierte a Efe Dani Creus, investigador principal del equipo GReAT de la compañía Kaspersky.
Destaca que en Europa, siete de cada diez mujeres que han sufrido ciberacoso a través del móvil mediante software de ‘stalkerware’, también han experimentado al menos una forma de violencia física o sexual por parte de su pareja, según datos del Instituto Europeo de la Igualdad de Género, citados por Kaspersky.